Una niña de 10 años sufría ataques de ansiedad porque se preocupaba por algo a diario. Después de 5 sesiones conmigo, no ha vuelto a tener un ataque de ansiedad en año y medio.

Una perra de 8 años, de tamaño mediano estaba muy ansiosa y nerviosa desde que sus dueños la adquirieron hace 4 años. Las 6 emociones que se liberaron estaban todas relacionadas con su mudanza hace 4 años. Inmediatamente después de la sesión, la perra se calmó. Los dueños y la perra parecen disfrutar el uno del otro.

Una mujer de 33 años se hurgaba los pies hasta hacerlos sangrar desde hacía dos años. Sentía un dolor constante al caminar. Después de 3 sesiones, pudo pasar la semana sin hurgarse los pies ni una sola vez. En otoño de 2017, ¡hacía un año que no se pellizcaba!

~Susan B