Mis familias de leones me saludan. Viven en grandes complejos en la sabana africana y paseo con ellos por la sabana hasta que tienen unos 3 años y medio. Me siento privilegiado de que me marcaran para formar parte de sus manadas de leones. Sí, me rociaron numerosas veces para confirmar que pertenezco a ellos. Debo comportarme como ellos y aceptar que me hablan de forma telepática. La energía me está ayudando a captar cómo se sienten y a saber cuándo quieren frotarme las mejillas para saludar, cuándo besarles la frente cuando me lo ofrecen en señal de confianza, etc.

Me fascina la medicina energética y estoy aprendiendo todo lo que puedo. Utilizo la energía y la telepatía con animales salvajes y pude establecer vínculos con leones en la sabana africana, donde he ido a trabajar con ellos en mis vacaciones durante los últimos cuatro años. Gracias a la captación de su energía, establecí vínculos con los más viejos, que normalmente no aceptan fácilmente a la gente nueva, sobre todo pudiendo estar con ellos sólo unas pocas semanas al año.

También he investigado otras cosas y parece que soy alguien a quien llaman empática que capta las energías de otras criaturas. (Leí esto hace unos años y seguí algunas páginas web para aprender a manejarlo ya que me duelen los hombros cada vez que un vampiro energético pasa por mi lado y descarga energía negativa sobre mis hombros y me chupa la energía positiva). Pero con mis leones, sólo me devuelven amor, cariño y sólo se pelean entre ellos cuando vienen a saludarme y se empujan para ser los primeros en rozarme las mejillas. Estoy experimentando para ver cuánto puedo aprender de ellos estando entre ellos usando mi propia energía y aprendiendo telepatía con ellos ya que son tan diferentes a los animales más pequeños a los que estaba acostumbrada de niña en Europa. Así que estoy aprendiendo por mi cuenta sin la guía de otros.

Gracias por ayudarme a comprender mejor la medicina energética, ya que los principios me ayudan a comunicarme y a saber cómo comportarme en diferentes situaciones cuando estoy con mis queridos leones, que era mi sueño de la infancia. Son el amor de mi vida y me siento privilegiada por haber tenido la oportunidad de estar con ellos unas semanas al año durante los últimos cuatro años.

Muchos abrazos de león,

Zdenka Vojkuvkova