Cuando empecé a practicar, mi hija no era testable y no creía en Emotion Code por ello. Después de aprender sobre las razones por las que la gente no es testable y descartar la deshidratación, le pregunté si tenía una desalineación del cuello y ¡la tenía! Pude utilizar un imán para facilitar la realineación de su cuerpo y, cuando volví a examinarla, ¡era testable! No se lo podía creer.

Estaba trabajando en mí misma e identifiqué una emoción atrapada que había heredado. Se remontaba a 6 generaciones por parte de mi madre. En cuanto liberé la emoción, me invadió la alegría, la gratitud y las lágrimas. Estas mujeres de mi antigua familia (mis antepasadas) se acercaron a mí y me dieron las gracias. Estuve llorando durante 10 minutos.

~Rachel M.