"Mi primera experiencia con Código de las Emociones fue con la perra de un cliente. Estaba muy asustada y se acobardaba cuando la gente iba a acariciarla. Una semana después de que le diera la sesión, el dueño de la perra la sacó a pasear y la perra corrió hacia otro dueño para que la acariciara. También tenía nódulos a lo largo de la columna vertebral que desaparecieron después del trabajo. El segundo perro de la familia ya no la acosa y la dueña quedó muy satisfecha con la sesión."

~Marilyn Raed, Gran Bretaña

Aunque Discover Healing no puede garantizar ningún resultado específico y los testimonios enviados no constituyen una garantía o predicción con respecto al resultado de cualquier persona que utilice El Código de la Emoción® para cualquier asunto o problema concreto, los testimonios publicados reflejan las experiencias de estos usuarios específicos.