"El resultado más pronunciado que he visto hasta ahora al aplicar el método The Emotion Code® ha sido al trabajar con mi gato. Frank es un gato rescatado que adoptamos en Nápoles (Italia) cuando era un gatito y había sido abandonado por su madre. Desde el momento en que lo llevamos a casa, era extremadamente asustadizo y no permitía que nadie se le acercara. Cuando se hizo mayor, dejaba que mi marido lo cogiera brevemente, pero en general nos evitaba a mí y a nuestros hijos y siempre se escondía cuando había invitados en casa.

Una noche, estaba acurrucado dormido cerca de mí, así que aproveché la oportunidad para limpiar algunas emociones atrapadas. Sólo pude trabajar con él unos 5 minutos antes de que se fuera corriendo. No anoté las emociones que limpié, pero recuerdo que fueron unas tres. Me quedé sorprendida cuando, más tarde esa noche, se acercó a mí y empezó a ronronear. Ahora acude a mí más que a mi marido para que le preste atención y rara vez se esconde cuando vienen visitas. En cambio, sale a verlos y, en un par de ocasiones, ha dejado que lo acaricien. Siento que ahora es mucho más feliz".

~Cynthia F., EE.UU.

Aunque Discover Healing no puede garantizar ningún resultado específico y los testimonios enviados no constituyen una garantía o predicción con respecto al resultado de cualquier persona que utilice El Código de la Emoción® para cualquier asunto o problema concreto, los testimonios publicados reflejan las experiencias de estos usuarios específicos.