"Me gustaría compartir una experiencia personal que tuve utilizando el Código de la Emoción®, un método de uso de pruebas musculares para liberar emociones atrapadas, que ha sido desarrollado por el quiropráctico, Dr. Bradley Nelson, después de que se le diera el regalo de la información de arriba.
"Una amiga me invitó a acompañarla a España en diciembre de 2011, para compartir unas vacaciones en Marbella. Afortunadamente, había programado mi revisión ocular anual para el lunes 28 de noviembre, de modo que no me estresara por mi salud ocular, ya que mi madre tiene glaucoma y, por lo tanto, soy candidata. Sin saberlo yo, ¡el glaucoma no era mi mayor problema de salud ocular ese día!
"Después de tomarme fotos de los ojos, me informaron de que tenía una hemorragia en el ojo derecho y que era muy importante que volviera el viernes 1 de diciembre para que me hicieran un seguimiento para ver si se estaba agrandando. Si se estaba expandiendo, el siguiente paso sería la cirugía ya que, si seguía creciendo, podría perder la vista en ese ojo. Me enseñaron la foto y vi lo que había detectado la cámara.
"Uno pensaría que la posible pérdida de la vista superaría un viaje de veinticinco días a España y Portugal. A día de hoy me asombra no haber sentido tanta aprensión al respecto. Pensé: 'Vale, tengo Emotion Code. ¡Es un buen momento para ver si funciona de verdad!
"En contra de la comodidad del médico y asumiendo toda la responsabilidad del resultado, concerté otra cita para el martes 27 de diciembre, exactamente un mes después de enterarme de la hemorragia. Pasé unos quince minutos cada día liberando, de media, tres emociones. Cuando miro hacia atrás, todavía me asombra la paz que sentía al utilizar este método y la confianza en que funcionaría. Al fin y al cabo, ¡se trataba de mi vista! ¿En qué estaba pensando?
"Dos días después de volver de viaje, acudí a mi cita sin estar preparada para lo que revelaban las fotografías de mis ojos. Después de ver los resultados, el médico me dijo: 'Era el ojo derecho, ¿verdad? Le contesté que sí. Me dijo: 'Bueno, sé que lo era, porque tengo las fotos del antes y el después de sus dos ojos'. Estoy tan asombrada de lo que veo, ¡o de lo que no veo! Ya no hay hemorragia en su ojo derecho. Está completamente curado. No sé lo que has estado haciendo, pero sea lo que sea, sigue así'.
"Después de mirar las fotos yo mismo, procedí a mostrarle y contarle lo que había estado haciendo, ya que suelo llevar una copia de la carta Emotion Code conmigo. ¡Doy gracias! ¡Doy gracias!Doy gracias".
~Fran Westin, Carolina del Norte, EE.UU.
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