"Ayer a mi hijo pequeño de 5 años le dio dolor de barriga justo antes de ir a kárate, así que su hermano se fue a clase y nosotros nos sentamos fuera con un cubo de basura. Estaba histérico, preocupado por si vomitaba, aunque nunca lo hizo. También lloraba porque echaba de menos el kárate y le hacía mucha ilusión. Luego en casa se pasó otra hora y media sentado cerca del váter llorando y llorando. Le froté un poco de aceite de jengibre, hinojo y menta en la barriga, y luego limpié algunas emociones atrapadas -miedo a vomitar, culpa y algunas otras. Entonces me sentí impulsada a sacar mi Body Code™ y lo hice al azar, ya que no lo había usado todavía. Eliminé un desequilibrio, un virus y una bacteria. Como por arte de magia, sonrió y dijo: "¡Me siento mejor mami!". Después de quejarse, llorar y enloquecer durante 3 horas, saltó al sofá, se acostó y vio Pokemon. ¡Wow! Estoy impaciente por sumergirme más en Body Code y llevar las cosas a otro nivel".

~Shannon Flores, California, EE.UU.

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