Por Margo Mae, Personal de DiscoverHealing

Ya sabes dónde está tu ropa de entrenamiento. Está cogiendo polvo en la cinta de correr, que fue tu propósito de Año Nuevo. Justo al lado de ese libro de italiano conversacional que fue tu propósito del año pasado.

No hace mucho contábamos los segundos que faltaban para el Año Nuevo. Muchos de nosotros nos propusimos ser mejores, más sanos o tener más logros en el año venidero. El futuro parecía prometedor.

Pero ahora estamos en marzo, y ese nuevo comienzo parece tan sucio como la nieve recién caída del mes pasado.

Si tienes problemas con tus propósitos de Año Nuevo -o te has dado por vencido-, anímate. Ahora es el momento perfecto para reajustar tus propósitos para un 2016 más abundante.

Repasa: Repasa tus propósitos de Año Nuevo. ¿Siguen teniendo sentido o han sido sustituidos por otros? Puede que esa dieta de moda ya no sea tan importante como pasar tiempo de calidad con tus hijos.

Revisa: Si te gusta tu propósito pero te cuesta cumplirlo, ponte metas más pequeñas que te ayuden en el camino. Ese maratón sigue siendo una gran idea, pero empieza con una rutina de footing razonable. Conseguir pequeñas victorias te motivará para seguir trabajando hacia tu objetivo.

Liberación: Compruebe usted mismo utilizando El Emotion Code para ver si tienes alguna Emoción Atrapada que te impida avanzar en tu objetivo y sabotee tu resolución. El Emotion Code revelará equipaje emocional de eventos pasados que en realidad están afectando el tiempo presente. ¡Liberar el equipaje del pasado para vivir completamente en el presente!

Volver atrás: En realidad no puedes dar marcha atrás al reloj, pero puedes reajustar tu forma de pensar. Olvídate de los problemas del pasado e imagina todo el potencial que aún te depara el año. Una vez que hayas restablecido tu propósito, celebra tu nuevo compromiso con una recompensa saludable. Al fin y al cabo, ¡mejorarse es divertido!

A medida que el frío del invierno se funde lentamente con la primavera, que sirva de recordatorio de que nunca es demasiado tarde para repasar, revisar, liberar y resetear. Puede que hayan pasado varias semanas desde Nochevieja, pero aún tienes tiempo de sobra para dar lo mejor de ti mismo.

¿A quién le importa qué hora es? ¡Haz que 2016 sea tu año más abundante!

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